El programa coral universitario es un lugar en donde las personas que gustan de la música llegan a hacer vínculos muy fuertes, tanto que algunos han llegado al altar.
Un poco de historia
A partir de 1997, la Dirección General de Música, bajo la dirección del maestro Raúl Herrera, decidió retomar la idea plasmada en los años sesenta, de formar coro universitarios, apoyó la formación de coros en las Escuelas y Facultades, con el propósito de ofrecer a la comunidad universitaria la oportunidad de vivir una experiencia musical, cultural y humana.
En sus inicios comenzaron siendo cinco coros, pero en la actualidad se cuenta ya con nueve, de diferentes Facultades de Estudios superiores (FES) y Facultades del campus central Ciudad Universitaria.
Con el paso de los años los coros se han ido sumando, logrando así dar un concierto de dos horas con tan sólo tres o cuatro canciones por coro.
Los primeros serán los últimos…
Existe un coro, el cual ha logrado sobrepasar al PCU, se trata del coral Ars Iovialis (Arte Juvenil), de la Facultad de Ingeniería. Se formó en septiembre de 1990. Este coro está formado principalmente por estudiantes de ingeniería, aunque incluye a estudiantes de otras facultades, como la mayoría de los conjuntos corales de la UNAM.
En el concierto del pasado diciembre, hizo gala de su veinteavo aniversario, por lo cual, para rememorar sus inicios, el director y fundador del Coro de Ingeniería, Oscar Herrera, evocó la canción de The Majesty and Glory of Your Name, de Thomas Eugene Fettke, la cual fue de las primeras que puso con su coral.
Además, decidió consentir a sus coristas, ya que muchos de ellos fueron o son fan de Harry Potter. La canción Double Trouble, que aparece en la tercera película, El Prisionero de Azkaban, se llevó los aplausos del público.
Una estudiante de Hogwarts, de la casa de Gryffindor, tomó el lugar de una corista, con túnica negro y vino, bufanda y barita en mano entonó la citada canción, misma que no aparece en el libro de J. K. Rowling, sino que fue una invención del director musical John Williams, el cual tomó el texto del libro Macbeth, de William Shakespeare, en el momento en que las brujas se encuentran frente al caldero.
Así ellos fueron quienes cerraron con la participación de los coros de manera individual, teniendo este privilegiado lugar a causa de su trayectoria y gran afinación, con la cual han logrado ser el coro que más sobresale del PCU. Es el único que tiene un repertorio tal que abarca todo tipo de música: clásica, popular, religiosa y profana, cantando obras originales de los grandes compositores o arregladas para coro.
Así, Ars Iovialis ha interpretado Carmina Burana los poemas de Baviera (con la Orquesta Philarmonia en 1992 y con la Orquesta Sinfónica Juvenil de la ENM en 1995), las Suites The Many Moods of Christmas (con la Orquesta Philarmonia), obras religiosas Bach, Mozart, Händel y Vivaldi, Canto Gregoriano, Polifonía, canciones tradicionales mexicanas y canciones de los Beatles.
Oscar Herrera, aprovechó el concierto para anunciar un concierto que tiene en puerta, en el Auditorio Nacional, recinto que en el cual son pocos los que tienen acceso, y sin embargo, él conoce tan bien, por los diferentes conciertos que ha ofrecido en conjunto con otros coros, tales como Pro Música y el coro Filarmónico de la UNAM.
Rotación
Muchos de los estudiantes de la UNAM han pasado de un coro a otro, en repetidas ocasiones por los horarios, por la temática manejada de cada director del coro o por los cambios de los mismos. Tal es el caso de Nathalie Escutia, ex corista de Fratelli (el coro de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales) y después de Ars Iovialis (Coro de la Facultad de Ingeniería).
“Resulta que a final de cada semestre se reúnen todos los coros universitarios y hacen un gran concierto general, entonces cada coro canta las mejores obras que puso durante todo el semestre.
“Yo pertenecía a este coro, Fratelli, y la verdad el uniforme era bastante sencillo y las piezas también. Me estaba durmiendo y casi para el final veo que entran los chavos del coro de Ingeniería que eran chicas con vestidos de noche y los chavos traían traje, todo muy elegante.
“Cuando se pusieron a cantar me quedé sorprendida, me despertaron. Pusieron obras muy complicadas con solistas, que después supe que no eran del coro, sino de la Escuela Nacional de Música. Era la misa de coronación de Mozart.”
Varios son los que opinan respecto a lo inestable que es el PCU, en términos de coristas, ya que estos puede ir y venir de un coro a otro cuantas veces quieran, siempre y cuando cumplan con la audición, los ensayos y el uniforme de cada uno.
A pesar de esto, el hecho de que los estudiantes se vayan de un coro a otro suele traer problemas, como le pasó a Douglas Tarnawiecki, ex director del coro de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales Fratelli, sólo duró dos semestres.
“En mi primer semestre hubo una desbandada, parece que es una práctica que cuando entra un director nuevo toda la gente se va. Muchos se cambiaron a Arquitectura, donde entró Gabriel Franco, a lo mejor porque ya la conocían (…) está bien si no te gusta este coro te vas a otro, yo tengo estudiantes de Filosofía y Letras”
También, como se puedo apreciar, no son solamente son alumnos los que deciden cambiarse de un coro a otro, sino los mismos profesores suelen dejar los coros, como el ex director de Fratelli, Emiliano Gaviño, que duró cinco años al frente del coro, y sin embargo, decidió dejarlo:
“El trabajo era muy agotador y aunque gratificante decidí dedicar más tiempo a la educación musical escolar e infantil. Doy clases en el instituto Asunción, ahí me dedico a dar clases a los niños de primaria alta. Además doy un taller de violín por medio del método Suzuki. Los estudiantes cambian de actividades, por lo que muchas veces aunque quieran seguir en algún coro no pueden, ya no les da tiempo y se van, lo cual tampoco es malo, mucha gente nueva llega y el coro se renueva”.
La renovación
Un coro que se encuentra en una situación similar a la de Fratelli es el Arquicoro (coro de la Facultad de Arquitectura) hace cuatro semestres, en el concierto de la sala Xochipilli de la Escuela Nacional de Música (ENM) se fueron dos directores, Emiliano Gaviño y Lucía de Lourdes García Salinas.
En su lugar entró Gabriela Franco quien se hizo merecedora a la beca que otorga The Dartington Summer School 2006 en el Reino Unido, en donde tomó clases magistrales con Evelyn Tubb, Susan Bickley ySthepen Varcou. Ella ya colaboraba con el PCU como asesora vocal.
En su primer semestre como directora del coro de Arquitectura intentó poner la canción de Seasons of love de Jonathan Larson, a pesar de grandes esfuerzos se trataba de una canción que exigía mucho de los coristas. La decisión de pulirla fue la adecuada ya que dos semestres después lució con la ayuda de demás instrumentos, voces afinadas y un solista seguro de sí mismo.
El recuerdo de los que se fueron para siempre
La intervención del coro de la FES Iztacala siempre trae buenos recuerdos ya que lleva por nombre “Coro Luis Merino Macías” en honor a su ex director, que falleció de un cáncer de estómago.
A pesar de haber tenido problemas por la repentina falta del director, el coro salió a flote gracias al apoyo de los coristas y del asesor vocal Luis Antonio Reynoso, quién tomó este puesto en lo que asignaban a un director definitivo.
Fue Cecilia González Ríos, quien tomó la batuta de este coro, con el cual interpretó Aleluya Pastorcitos, del cual, la ex directora del coro de Arquitectura fue la que hizo el arreglo.
El papel de la difusión y los objetivos del PCU
La difusión con la que cuenta el programa coral universitario es poca o nula, tanto que varios de los directores comentan que a la Universidad no le interesa.
Sin embargo Ana Patricia Carbajal, coordinadora de PCU comenta: Hemos mejorado pero siempre habrá algo más que se pueda hacer, los alumnos también nos proponen otras formas de difusión distintas a las habituales. Me parece que en este rubro nunca se termina de innovar pues siempre hay un nicho que se puede cubrir, la promoción de boca a boca es muy importante pero no hay que dejar del lado distintos medios: gaceta UNAM, radio UNAM, IMER, volantes, carteles o banners, mails a la comunidad universitaria, página web, etc.
Las opiniones son distintas, sin embargo, existe la constante de que hace falta el apoyo de la institución, a pesar de los esfuerzos hechos por los estudiantes “La difusión del PCU está en el esfuerzo que hagan sus propios participantes ya que la poca ayuda institucional generalmente es lograda por la iniciativa de sus miembros y no de las autoridades universitarias”. Comenta Emiliano Gaviño.
El PCU, no cuenta con unos objetivos escritos, pero la mayoría de los integrantes se imaginan los mismos, tales como la unión y el disfrute de la música. “Facilitar la participación de las personas de las diferentes facultades a formar parte de un coro. Pero también pueden entrar personas externas a la UNAM, aunque en su mayoría son los estudiantes.” Comenta una de las coristas de Fratelli.
Mientas que Ana Patricia Carbajal, dice que se trata de promover la música coral a través de la formación de coros, generar público y sobre todo generar comunidad.
El alumbramiento de un nuevo ser
Constantemente se está en el intento de crear nuevos coros, muestra de eso fue el semestre pasado con el coro de la facultad de Derecho. Su caso se logró gracias a su directora Gabriela Patricia Díaz Rodríguez.
Ana Patricia Carbajal comentó que en ese concierto estaban de gala, porque un nuevo coro se había formado. Así pasaron sus integrantes, seguidos de la directora e interpretaron una sola canción: Dormi, dormi o bel bambin, canción tradicional italiana. Se espera que en el próximo concierto se puedan incorporar con más canciones.
Gaudeamus Igitur
Durante todos los semestres, para cerrar con broche de oro todos los coros se juntan para cantar dos canciones, el Gaudeamus Igitur, himno de las universidades y alguna que elijan, se cambia cada semestre. Se le pide al público que se ponga de pie, en señal de respeto y las más de doscientas voces se unen para entonar el canto común.
No solamente se unen en ese momento las voces, sino que los vínculos creados por el PCU son muy fuertes. Con la ayuda de la música las amistades se van forjando, ya sea entre los integrantes de las carreras, facultad o facultades, ya que existe toda una mezcla en el estudiantado.
Se hacen convivios, antes del concierto final, en donde todos los integrantes tienen la oportunidad de conocerse e intercambiar puntos de vista musicales y personales. No es gratuito que las relaciones creadas dentro de los coros hayan llegado, en algunas ocasiones, hasta el altar.